martes, 7 de octubre de 2014


¿Se heredan las buenas Notas?

Un estudio realizado con más de 13.000 gemelos británicos de 16 años demuestra que los genes marcan la inteligencia y otros rasgos de personalidad importantes en los logros académicos

Dos Hermanas gemelas.
Los estudiantes de Secundaria que saquen algún suspenso pueden dar una buena explicación en casa acerca de sus malas notas, aunque es probable que sus padres no quieran admitir este argumento. Una nueva investigación, dirigida por el King's College de Londres, afirma que la inteligencia y muchos de los rasgos de personalidad que influyen en el éxito o el fracaso académico de un alumno, como la seguridad en sus propios méritos o los problemas de conducta, vienen marcados en los genes.
En el estudio, publicado Actas de la Academia Nacional de Ciencias (PNAS), participaron 13.306 gemelos de 16 años, que fueron evaluados en una serie de medidas cognitivas y de personalidad. Además, los investigadores tuvieron acceso a sus notas académicas en el llamado Certificado General de Educación Secundaria.
En total, se tuvieron en cuenta la inteligencia, la autoeficacia(confianza en la propia capacidad académica), la personalidad, el bienestar, el ambiente en el hogar, el entorno escolar, de salud, los problemas de conducta informados por los padres y los problemas de comportamiento del adolescente.
Los gemelos idénticos comparten el 100% de sus genes y los gemelos no idénticos (al igual que cualquier otro hermano) comparten el 50% de los genes que varían entre las personas. Pero todos ellos comparten el mismo entorno (familia, escuela, maestros, etc). Mediante la comparación de los gemelos idénticos y no idénticos, los investigadores fueron capaces de estimar la contribución relativa de los factores genéticos y ambientales. Así pues, si en general, los gemelos idénticos son más similares en un rasgo particular que los no idénticos, las diferencias entre los dos grupos se deben a la genética en vez del ambiente en el que viven.
Influencia genética
«Investigaciones previas ya ha establecido que el logro educativo es heredable. En este estudio, hemos querido averiguar por qué ocurre. Lo que demostramos es que la heredabilidad del rendimiento escolar es mucho más que la inteligencia, es la combinación de muchos rasgos que son todos hereditarios en diferentes grados», explica Eva Krapohl, coautora del estudio, del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia (IoPPN) del King's College.
«Es importante señalar que la heredabilidad (la importancia de la genética en una persona) no significa que todo esté ya predeterminado. Simplemente significa que los niños difieren en lo fácil y agradable que encuentran el aprendizaje y que gran parte de estas diferencias se ven influidas por la genética», añade.
Los investigadores encontraron que la influencia de la genética en las notas escolares era del 62%. Los rasgos individuales variaban entre el 35% y el 58% heredable, con la inteligencia como factor más importante. Juntos, los nueve rasgos tenidos en cuenta representaron el 75% de la heredabilidad de las puntuaciones en las notas.

Según Kaili Rimfeld, también de la IoPPN, «nuestros resultados apoyan la idea de que un enfoque de aprendizaje más personalizado puede ser más exitoso que un enfoque igual para todos. Encontrar que el logro educativo es heredable no significa que los maestros, los padres o las escuelas no sean importantes, ya que la educación es más de lo que le sucede a un niño de forma pasiva»

http://www.abc.es/ciencia/20141007/abci-heredan-buenas-notas-201410071444.html

miércoles, 2 de julio de 2014

¿Deben los niños hacer deberes en verano?

Es aconsejable que de lunes a viernes dediquen algo de tiempo por las tardes a la lectura y a juegos que estimulen sus cabezas

El fin de curso se acerca y con él el inicio de una época en la que losniños tienen mucho tiempo libre. Campamentos de verano, actividades extraescolares, cursos de idiomas, deportes… son algunas de las opciones para que estén entretenidos y aprendan cosas nuevas pero, ¿dónde queda el estudio? ¿Es recomendable que los escolares hagan deberesen verano?
«No se trata de realizar un estudio sistemático de las distintas materias, no tendría sentido estaría fuera de contexto intentarlo. Hay muchos modos de seguir aprendiendo y enriqueciendo a los futuros miembros de la sociedad», afirma Rosa Peris, profesora de los grados en Maestro de Educación Infantil y Educación Primaria de UNIR. En su opinión, el verano es «un momento óptimo para realizar actividades enriquecedoras distintas a las del curso académico, suponen un enriquecimiento personal».
Pero tampoco es conveniente que los estudiantes desconecten totalmente del colegio en vacaciones. «Lo recomendable sería tener un cierto hábito de trabajo. La desconexión total del trabajo mental no es buena. Me decantaría por la lectura y juegos que estimulen sus cabezas y muevan sus cuerpos» apunta.
En cuanto al tiempo que los niños y adolescentes deben destinar al aprendizaje en verano dependerá de las edades, pero es aconsejable que de lunes a viernes dediquen algo de tiempo por las tardes, después de comer. «Pero sin olvidar que el aprendizajes es también hacer deportes, excursiones, conocer la naturaleza, relacionarse con personas distintas, hacer planes con sus padres, etc», señala Peris.
Las tareas, además, tiene que estar personalizas para cada niño y es el equipo de profesores que le han dado clase durante el curso quienes tienen que proponer y decidir ese plan personal de trabajo veraniego. «Los libros generales de actividades no aportan tanto como un plan adaptado a cada chaval», advierte Peris.
Para que no vean estas tareas como un castigo, los padres pueden optar por los cursos de verano que combinan deportes, juegos, idiomas, lectura creativa, talleres de música, plástica, etc

miércoles, 23 de abril de 2014

EL'SÍNDROME DEL SAVANT'

EL'SÍNDROME DEL SAVANT'
"Me di un golpe en la cabeza y me volví un súper talento para las matemáticas"



Jason Padgett siempre fue un joven sin inquietudes intelectuales, cuyas principales aficiones eran, según él mismo relata, la fiesta y las mujeres. Sin estudios superiores, pasó buena parte de su juventud trabajando en la tienda de muebles de su padre, hasta que una pelea en un bar, hace ahora doce años, le cambió la vida para siempre. Sufrió un leve traumatismo craneoencefálico que lo dejó inconsciente y le hizo pasar una noche en el hospital. A la mañana siguiente, se despertó obsesionado por las matemáticas y la física, sobre todo por los fractales, que podía dibujar con una precisión nunca antes vista.
Durante varias semanas se encerró en su casa creyendo que se había vuelto loco, pues su memoria era capaz de retener, por ejemplo, el santoral entero del calendario o de realizar complejos cálculos matemáticos. Tras visitar a varios médicos, uno de ellos le habló de un especialista en trastornos de memoria ocasionados tras traumatismos cerebrales. Este le diagnosticó síndrome del savant. Una patología que sólo sufren unas 50 personas en el mundo.
La característica común a estas personas es que tienen una memoria prodigiosa, así como grandes dotes para el arte, el cálculo matemático y las habilidades mecánicas o espaciales. La mayoría de estos ‘savants’ han sufrido algún tipo de lesión cerebral, por lo que sus capacidades extraordinarias son el resultado de alguna anomalía en las conexiones neuronales, ya sean causadas en el desarrollo embrional o por contusiones cerebrales después del alumbramiento.
En la actualidad no existe una teoría médica capaz de explicar en su totalidad la razón de esta curiosa condición humana, como matiza el doctor Darold Treffert, uno de los máximos exponentes de la materia, en el artículo científico Savant Syndrome: An Extraordinary Condition.
El alumbramiento de las capacidades latentes
Padgett ha decido relatar su experiencia vital en un libro de memorias que lleva por título Struck by Genius: How a Brain Injury Made Me a Mathematical Marvel. Al recuperar la consciencia tras el golpe comenzó a apreciar hasta el más mínimo detalle de las figuras, llegando a obsesionarse por las formas geométricas. “Me preocupé mucho, pero al mismo tiempo me parecía muy hermoso porque estaba observando un mundo nuevo, que nunca antes me había llamado la atención ni que siquiera podía apreciar”, recuerda.
La mayoría de las personas diagnosticadas con este síndrome han sufrido algún tipo de lesión cerebralUnos días después decidió dejar el trabajo y dedicarse íntegramente a las matemáticas y la física,centrándose en los patrones geométricos de los fractales y dibujándolos compulsivamente. Cuando diagnosticaron su enfermedad, “en un momento en el que ya pensaba que me había vuelto completamente loco”, viajó a Finlandia para ser estudiado por el doctor Berit Brogaard, quien le realizó resonancias magnéticas para estudiar su cerebro. Fue entonces cuando descubrió la razón de su nuevo talento: el hemisferio izquierdo tenía una gran actividad, sobre todo en la región parietal relacionada con las habilidades matemáticas.

Ahora, con 43 años, da clases de matemáticas y ha escrito varios artículos en los que explota su nuevo talento. Como él mismo asegura en el libro: “Soy la prueba viviente de que no sabemos cómo funciona realmente el cerebro, y de que todos nosotros tenemos capacidades latentes sin desarrollar. Si me ha pasado a mí, le puede pasar a cualquiera”.


domingo, 21 de abril de 2013

LOS PROBLEMAS DE ATENCIÓN Y LA AUDICIÓN

Muchos niños con problemas de atención plantean dudas acerca de si oyen o no oyen bien. Tanto es así que a muchos de ellos se les realiza una audiometría cuyos resultados arrojan una absoluta normalidad e incluso el especialista  comenta a los padres que su hijo tiene una capacidad auditiva superior  a la normal. En realidad, estos niños oyen pero no escuchan.

¿Cuál es la diferencia entre la audición y la escucha?
La diferencia principal está en la actitud de comunicación del niño. Precisamente, un niño con sensibilidad auditiva a veces cierra la escucha para protegerse de la “agresión” fuerte que le produce la llegada del sonido. La escucha es un proceso voluntario, activo y selectivo (escuchamos aquello que es de nuestro interés). La audición es un proceso involuntario, pasivo y no selectivo.

La atención es una capacidad cerebral o Función Ejecutiva que depende de muchos factores. Consiste en seleccionar un estímulo “objetivo” y relevante entre todos los que llegan al sistema nervioso (Irrelevantes).Es fundamental para evitar la sobrecarga indiscriminada de estímulos. La capacidad de atención depende de la calidad de la llegada de los estímulos visuales y auditivos.

El desarrollo de la función auditiva es uno de los grandes motores de desarrollo y juega un papel muy importante en el desarrollo motriz y físico (equilibrio y coordinación), emocional (apertura hacia el entorno y los que me rodean) y mental (interpretar con sentido la información que llega al cerebro desde el oído para que pueda ser almacenada y recobrada posteriormente si es necesario).

Si el oído no realiza adecuadamente su función, la conducta del niño puede tener rasgos de falta de atención e hiperactividad asociados a un problema de escucha (bloqueo o pérdida en una determinada frecuencia del lenguaje o varias). Entonces podemos observar estas conductas:

o   El niño no atiende a las llamadas de sus educadores y padres.
o   Contesta a menudo preguntando como si no hubiera oído la pregunta.
o   Atención baja, muy dispersa y fluctuante.
o   Le cuesta concentrarse ante estímulos de ruidos auditivos (sonidos cotidianos de la calle, en la escuela, voces, etc). En estas situaciones, presentan cambios de carácter o mal humor.
o   Han tenido episodios frecuentes de otitis repetitivas.
o   Han tenido o tiene problemas para desarrollar el lenguaje hablado.
o   Presentan problemas de lectura porque les resulta difícil asociar una información visual (letra) a su sonido; les cuesta diferenciar palabras o letras con similitud auditiva; tienen baja memoria auditiva inmedita, etc.
o   Suelen estar ausentes y volcados en su mundo interior en vez de estar hacia los estímulos que llegan de fuera.

Padres y maestros deben estar atentos a estos síntomas que aparecen en la escuela y en casa y que pueden afectar al aprendizaje y al desarrollo personal. Estos niños requieren un estudio específico de su capacidad de escucha  y una terapia adecuada además de medidas o tratamientos psicopedagógicos. Una de las posibles ayudas es la Terapia de Estimulación sensorial y neurológica Tomatis que trata de conseguir la estimulación y funcionamiento eficaz del oído medio para conseguir que todas las frecuencias auditivas puedan ser procesadas e integradas de forma adecuada en el cerebro y se produzcan así mejoras en el aprendizaje, lenguaje, lectura, atención  y comunicación.
  

sábado, 10 de noviembre de 2012

Gimnasia Cerebral y Dificultades de Aprendizaje



La Gimnasia Cerebral o Brain Gym es una técnica de estimulación neurológica basado en la hipótesis, de acuerdo a los hallazgos en neurociencia, de que las conexiones nerviosas crecen cuando nos movemos con intención. Trata de abrir caminos neuronales, activar y conectar todo el cerebro mediante el movimiento. Vivir y aprender es moverse.


La gimnasia cerebral tiene su origen en 1969 de la mano del educador Paul Dennison, quien acuñó el concepto de kinesiología educativa en su Centro de Aprendizaje de California, Estados Unidos. El objetivo del Brain Gym es hacer de cualquier habilidad una acción refleja y automática y así minimizar y resolver todos los bloqueos que se han producido en el aprendizaje de una determinada área. Se trata de que el cerebro integre un aprendizaje sin carga emocional negativa y de forma natural.


La gimnasia cerebral consta de una serie de veintiséis movimientos corporales sumamente sencillos (se pueden hacer en casa varios minutos al día), diseñados para ayudar a niños, adolescentes y adultos a “enchufar y conectar” ambos hemisferios de nuestro cerebro. Nuestro cerebro se compone de 2 hemisferios, el derecho y el izquierdo. No son contrarios sino complementarios y su trabajo en equipo es fundamental para poder realizar cualquier tarea cognitiva, motora, verbal y emocional.
La gimnasia cerebral pretende lograr el dominio TOTAL de la mente, favorecer la conexión “ideal” entre ambos hemisferios. Está demostrado que las personas con problemas de aprendizaje suelen trabajar con un solo hemisferio. Esto hace que el individuo reciba la información pero no la integre, produciéndose bloqueos o dificultades de aprendizaje.

Las actividades de Brain Gym están diseñadas además para estimular el funcionamiento adecuado del cerebro y una comunicación eficiente entre los muchos centros funcionales que están ubicados en él. Las actividades se enmarcan dentro de tres dimensiones:

·         Dimensión de Lateralidad: es la preferencia por utilizar una parte de nuestro cuerpo (izquierda o derecha) pero requiere coordinar un hemisferio cerebral con el otro. Esta capacidad es fundamental para la habilidad de leer, escribir y comunicar.
·         Dimensión de Enfoque: capacidad de coordinar las partes altas y bajas del cerebro. Esta capacidad esta relacionada con la sensación y expresión de las emociones.
·         Dimensión de concentración: conexión entre el sistema límbico o emocional y el cortex frontal (actividades cognitivas complejas) y es fundamental para prestar atención, la comprensión de instrucciones, regular nuestras emociones, etc.


El Brain Gym es un nuevo sistema de aprendizaje basado en el movimiento, divertido y fácil que es muy útil para alumnos con problemas de Aprendizaje que puede desarrollar habilidades concretas:

·         Mayor capacidad de concentración.
·         Desarrollo de la memoria.
·         Desarrollo de habilidades motoras gruesas y manipulativas.
·         Perfeccionamiento de la lectura y escritura.
·         Integración de las capacidades visuales, auditivas y táctiles.
·         Aprendizaje de Técnicas de relajación.


*En el centro ZANA realizamos actividades de gimnasia cerebral como complemento a la intervención psicopedagógica.
Bibliografía recomendada: “Brain Gym. Aprendizaje de todo el cerebro”. Paul Dennison. Editorial  Robin Book.

Por Cruz González Castro.

miércoles, 24 de octubre de 2012

Signos de alarma para la prevención de Dislexia en Infantil


            La dislexia es una de las Dificultades de Aprendizaje más comunes en la etapa de Primaria, e incluso, se mantiene en la etapa de Secundaria. En sentido literal, se habla de dislexia cuando nos encontramos con un niño o adolescente que tiene un trastorno o dificultad en el aprendizaje de la lectura y/o escritura. En la vida cotidiana, es un término que se aplica  a menudo a niños que presentan lectura lenta y silábica,  mala escritura e incluso problemas del habla o en el lenguaje. Es frecuente que estos alumnos escriban números al revés, lean alternando el orden de las letras o de las sílabas, sustituyan palabras, etc.

La dislexia no es un trastorno único, sino un conjunto de síntomas que aparecen como consecuencia de un trastorno de tipo neurológico ya que las diversas zonas cerebrales implicadas en el acto de leer no funcionan correctamente por falta de sinapsis y conexiones nerviosas creando así una inmadurez del desarrollo neurológico del niño.

Podemos detectar signos precoces de dislexia desde el periodo preescolar, alrededor de los cinco-seis años. A esas edades los signos más destacados son:
           
·     El niño hace algunas inversiones al hablar. Por ejemplo el niño dice “lapa” en lugar de “pala”, “saca” en lugar de “casa”, “petola” en lugar de “pelota”.
·      Le cuesta ubicarse en el espacio. Los padres le indican que deje un objeto en un lugar determinado y no lo encuentra; que vaya a buscar algo a una habitación y se pierda por el pasillo.
·     Ordena las cosas al revés, de derecha a izquierda (también puede ser un signo de lateralidad zurda o de lateralidad cruzada).
·    Tiene problemas importantes de movimiento: es torpe con su cuerpo, tropieza fácilmente, parece que no vea las cosas, se cae con facilidad, no es bueno en juegos deportivos con la pelota; tira los objetos con el codo sin darse cuenta, mal equilibrio…
·    A los cuatro años, escribe su nombre al revés, empezando por la derecha y le cuesta corregir esta tendencia.
· A los cinco años hace abundantes inversiones al escribir los primeros números, los escribe al revés y le cuesta corregirlo.
·   Chuta igual con las dos piernas, utiliza las dos manos para todo, pinta con una mano, escribe con la otra, empieza a dibujar con una mano, cambia el lápiz y sigue con la otra; lo mismo hace al comer, etc.
·      Llega a los cinco o seis años sin definir una dominancia lateral.
·     Cuando dibuja lo hace de abajo a arriba, empieza por el lado derecho del papel y va dibujando hacia el izquierdo.
· Le cuesta ponerse un pantalón o confunde prendas de vestir muy diferenciadas.Siempre se coloca los zapatos al revés.
·      A los cinco o seis años confunde la derecha y la izquierda.
·     Le cuesta diferenciar sonidos parecidos entre sí (deficiente discriminación auditivo fonética)

En todos estos casos, hay que actuar pronto, antes de que avancen los cursos y entre de lleno en el aprendizaje de la lectura (6 o 7 años) porque sólo podemos hablar de prevención si actuamos durante la etapa preescolar.

Los educadores que observen este tipo de signos en sus alumnos deben dirigirlos, cuanto antes, a un especialista que les ayude a diagnosticar la causa de estos trastornos y aplicar el tratamiento adecuado. Generalmente el problema puede resolverse aplicando un programa de tratamiento causal individual. Consiste en un conjunto de ejercicios, organizados por etapas, que se aplican en el gabinete de reeducación y, en algunos casos en casa o en la escuela. Constan de ejercicios para desarrollar las habilidades perceptivas y visuales básicas; desarrollar la dominancia lateral de forma correcta, estimulación psicomotriz, desarrollo del esquema corporal, la orientación espacial, etc. También son de gran eficacia los  Métodos de Estimulación neurológica por medio de la integración auditiva como la Técnica Tomatis.


jueves, 4 de octubre de 2012

Mi hijo no aprende:¿Qué son las dificultades de aprendizaje (DA)?



 En la actualidad, dentro de las aulas de los diversos centros educativos, nos encontramos con alumnos a los que parece que les cuesta APRENDER más que a otros. En ocasiones, no son comprendidos ni ayudados porque no se sabe qué les pasa exactamente “confundiendo” sus síntomas con una posible falta de capacidad, falta de interés y motivación, pereza, etc.

Se entiende por el término DA al conjunto de alteraciones que se manifiestan en dificultades importantes en la adquisición y utilización del lenguaje, la lectura, la escritura, el razonamiento o habilidades matemáticas. Se considera que su causa es una inmadurez de los procesos cognitivos del Sistema Nervioso Central.
        
Hay varias características básicas para el diagnóstico diferencial:

-Capacidad intelectual normal o superior comparados con los niños de su edad.
-Trastornos en ciertos procesos cognitivos y madurativos del niño: percepción, atención y memoria.
-Rendimiento escolar insuficiente  en una o varias materias básicas: lectura, escritura, cálculo y matemáticas…

En definitiva, engloba  dificultades específicas en niños con capacidad intelectual normal que ocasionan un bajo rendimiento escolar y en los que subyace una inmadurez cerebral con la presencia de trastornos específicos en diversas áreas; lenguaje, psicomotricidad, atención, memoria, razonamiento.. que no son la causa directa, sino manifestaciones de esa inmadurez.

Las DA son más frecuentes en niños que en niñas y afectan del 5 al 10% de la población escolar.

Los factores de riesgo son diversos: problemas durante el embarazo y el parto; en los primeros meses de vida; factores genéticos; factores de tipo bioquímico; dificultades de tipo articulatorio o retrasos en la adquisición del lenguaje; retraso y torpeza motriz; problemas de lateralidad, etc.

Casi siempre se realiza el diagnóstico de las DA cuando nos encontramos ante un fracaso escolar consumado y la presencia de dificultades emocionales (baja autoestima, fobia escolar), generalmente a partir de la edad de 7 u 8 años. Pero estos déficits se manifiestan claramente a la edad de cuatro y cinco años, y pueden ser ya diagnosticados en la edad preescolar.
Lo que sucede es que los déficits neurofuncionales se hacen evidentes cuando al niño se le exige el aprendizaje de materias instrumentales básicas (lectura, escritura, cálculo…).

De nuevo volvemos a la necesidad primordial de diagnosticar las DA cuanto antes dentro de programas de estimulación y terapias preventivas. La tarea de los equipos escolares de las escuelas y colegios en etapa infantil es fundamental, estableciendo medidas básicas y apoyos dentro y fuera del aula, para lograr la escolarización normal y la adaptación escolar y personal óptima de los escolares en situación de riesgo.


La reeducación de las DA fuera del ámbito escolar suele ser necesaria ya que normalmente, el sistema educativo actual no cubre las necesidades educativas de estos alumnos, o el alumno, debe RE-APRENDER de forma diferente el aprendizaje que no ha logrado de acuerdo a su forma de aprender y su Estilo Cognitivo.